Debido a la contingencia provocada por el virus del Covid19, el mundo ha dado un giro de 180°, donde cada una de estas actividades del ser humano tuvo que migrar a formato digital, no solo hablando de la industria médica, comercio, telecomunicación, sino hasta el deporte.
Han pasado 4 años, desde la última vez del encendido de la antorcha de los Juegos Olímpicos de Río 2016, una larga espera para grandes deportistas, entrenadores, comentaristas y audiencia, que estuvieron en la espera y con gran expectativas sobre los futuros Juegos Olímpicos. Si bien sabemos, Japón demostró en la clausura de Río la próxima sede olímpica, pues probó ser uno de los países con más avances tecnológicos, provocando la intriga de la audiencia .
Con el gran crecimiento de infectados por el coronavirus y la pronta esparcida del virus por todo el mundo, ocasionó que tuvieran que postergarse y por primera vez en la historia se realizaron en un año impar. Estas olimpiadas no solo serán historia por la pandemia, sino porque hubo grandes cambios como la incorporación de cinco disciplinas nuevas, paridad de género, ecológicos y nuevas estrategias de marketing.
Uno de los grandes problemas a los que se enfrentó Tokio, fue a la falta de público nacional y extranjero, ya que son los principales ingresos, y de esta manera el marketing jugó un gran rol. Así como ya es costumbre, grandes marcas buscan formar parte del listado de patrocinadores, es por esto que, Tokio 2020 en su página oficial clasificó en 4 categorías a sus patrocinadores, donde se presentan marcas que cada uno de los juegos se hacen presentes, esto ayudó a los ingresos del proyecto, pues representaron el 55% del presupuesto.
También, por la falta de asistentes se implementaron licencias de transmisión, esto con programas patrocinadores, convirtiéndose en el ingreso económico más fuerte; pues el programa de marketing creado, que podemos ver, son en los videojuegos, dado que Japón siendo potencia en esta rama, cuenta con marcas como Nintendo, Sega y Konami, crearon sus propias ediciones especiales (licencias) de los juegos de Tokio 2020.
Por otro lado, Tokio decidió no solo dar unas olimpiadas más; sino decidió transmitir un mensaje de esperanza, pues en cada una de sus comunicados, planeaciones y nuevas estrategias transmitió la competencia que el mundo está pasando, pues todos están en la lucha contra la pandemia de Covid19.
